Hay algo que nos parece poco congruente acerca de Renault. Por una parte han demostrado hasta el cansancio que sus motores son capaces de dominar la F1 con amplia superioridad ante cualquier rival. Mientras en el otro extremo las pesadillas de los clientes acerca de la confiabilidad de algunos de sus autos de producción y los elevadísimos costes de mantenimiento.
El
Megane representa a la perfección esta dualidad, su diseño ha sido siempre
atractivo y en sus versiones sport, logra neutralizar las líneas femeninas que
siempre dominan sus diseños para entregarnos modelos que parecen impulsados por
gasolina y testosterona, al que lamentablemente le falla la confiabilidad mecánica
seriamente y es tema recurrente en aquellos aventureros que decidieron por este
modelo.
Renault
presentara su Gama Megane con nueva imagen a partir de Enero del 2014. Pero en
este caso específicamente esperamos que la renovación de su imagen altere
positivamente su calidad mecánica de manera que este a la altura de su nuevo
diseño.