En 1975, mientras Europa se encontraba en plena revolución del automóvil urbano, Volkswagen dio un golpe de autoridad con el lanzamiento del Volkswagen Polo, un hatchback compacto que, sin pretensiones de superventas, conquistó las calles por su eficiencia, practicidad y precio accesible.
A lo largo de sus seis generaciones, el Polo ha evolucionado en diseño, tecnología y seguridad, convirtiéndose en uno de los modelos más consistentes y respetados dentro del segmento B.