Seguramente habrás escuchado
mucho acerca de Tesla Motors y probablemente, lo que más has escuchado son
malas cosas; Alto precio de sus productos, bajo rendimiento de sus modelos, un
incendio de algún auto por aquí, trabajadores lastimados en una de sus plantas por
allá, etc.
Alguien tan ingenuo y bien
intencionado como nosotros (tu amigo lector y yo), podría preguntarse
inocentemente con el candor que nos caracteriza: -¿Por qué una compañía que
tiene solo un modelo de producción, eléctrico, de alto precio, bajo desempeño y
con problemas de combustión espontánea genera tanto revuelo en los medios?-
La respuesta en simple aunque
complicada; Tesla está cambiando la industria automotriz, y eso, puede ser poco
agradable para los gigantes de la industria que se han empeñado en hacernos
creer que los vehículos eléctricos deben ser, pequeños, caros, poco rentables, inflamables
y feos… ¡Muy feos!
Inspirada en Nikola Tesla y
ubicado en California, Tesla Motors se distinguió desde su inicio por el
desarrollo de tecnología propias y la comercialización de vehículo eléctricos
grandes, atractivos y en esquemas no convencionales. El primer proyecto
reconocido fue el Roadster, un coupe deportivo basado en una plataforma Lotus,
pero para la cual se utilizo carrocería de fibra de carbono.
Para 2008 Elon Musk además de
accionista se convirtió en CEO de la empresa además de Gurú y representante de
la filosofía de la marca hasta hoy día.
Pero ¿Que tiene de malo Tesla
para otras marcas?
A fin de evitar inflar los
precios de sus unidades con el esquema de una red de distribuidores y ante la
falta de apoyo de empresarios, Tesla inicio la comercialización de su autos
directo al cliente, en su propia planta o vía telefónica y con un precio único.
Con el tiempo, Tesla ha
abierto una serie de tiendas de venta directa a nivel continental.
Por otro lado, la filosofía
Tesla de Servicio es que –El mejor servicio es, por supuesto, no necesitar
servicio- Por lo que Tesla es el único fabricante que ofrece autos 0 emisiones que
solo requieren 1 revisión anual (sin cambio de aceite, afinación o balatas),
valet que recoge tu vehículo a domicilio, y te otorga temporalmente como
substituto un vehículo tope de línea cada vez que tu auto requiera de
mantenimiento (Que puedes comprar a menos de $ 1 US dólar por kilómetro en su
odómetro, claro, tomando a cuenta tu Tesla usado) y garantía total al paquete
de baterías que lo único que no cubre es que le prendas fuego con una antorcha.
¿Imagina lo que representa
para cualquier fabricante la comercialización de partes, aceite y el sostener
una red de distribuidores y tener de pronto un competidor sin esa carga?…
Ahora imagina las fibras que
movió la sugerencia del Elon Musk de que Tesla podría considerar la producción
de Pick Ups en el futuro cercano.
Los años por venir presentan
varios retos para Tesla, sobretodo el de la rentabilidad, pero si la marca logra
constituir un portafolio de modelos amplio y consistente, el modelo de negocios
de la comercialización de autos
podría estar a punto de cambiar… para siempre.