El auge era tan grande que a su equipo de diseño se le dio la oportunidad de experimentar nuevas posibilidades de ingeniería.
El entusiasmo llevo al resultado lógico; ¿Cómo sería un súper auto Honda?
Hay
señales que desde la distancia pueden ser vistas claramente y sorprende que
algunos expertos de la industria no los quieran ver.
Durante
la etapa de restructuración de General Motors, después de haber caído en banca
rota, el gigante americano buscaba compradores muy ingenuos para quedarse con
Hummer, Opel y Saab.
Las estrategias corporativas de producto son más misteriosas aun que los caminos del Señor.
Si
bien es cierto que GM preparaba hace algunos años el terreno para deshacerse de
Opel, tal cual hizo con Saab, es decir; vender apenas un nombre, haber
arrancado de tajo productos Opel de mercados donde el cliente está altamente
identificado con el diseño, desempeño y marca alemana del GM, sustituyéndolo por productos Coreanos parecía carecer de sentido.