Lingenfelter
ha trabajado desde hace más de 40 años en la mejora de vehículos, específicamente
algunos de los modelos deportivos de General Motors.
En
los últimos años, esta casa ha producido kits de mejora mecánica y de
carrocería, creando algunos excelentes ejemplares. Todos ellos con notable
desempeño mecánico y algunos con cambios de diseño exterior.
Un
ejemplo de esas modificaciones exteriores fue por ejemplo aquel basado en un
Camaro SS; El proyecto de Camaro LTA 2010, que tomaba un Camaro SS de
producción, lo mejoraba mecánicamente hasta exprimirle 655 bhp, se mejoraban suspensión
y frenos y su frente y parte trasera se modificaban otorgándole la imagen de un
Firebird de principios de los 70.
¡Es
cuestión de gustos!
Si
bien Lingenfelter proporciona el hardware requerido para extraer el potencial mecánico
de los vehículos GM, intentar mejorar la apariencia exterior con cambios
radicales es más complicado de lo que parece.
La
última muestra de lo anterior es la Reaper, un todoterreno basado en una Chevy
Silverado y modificada por Lingenfelter que se presento en al Show de Chicago y
con la cual se pretende crear un rival a la altura de la Raptor de Ford y a la
vez aprovechar el nicho de mercado de este tipo de producto en el cual GM paraca
haber decidido no participar.
La
Silverado es ya de por si un excelente vehículo de plataforma GMT muy capaz y
Lingerfelter le agrega gráficos, cantoneras, suspensión Fox más alta y
reforzada, escape de alto flujo, ruedas y llantas off-road de 33’ cofre, parrilla, defensa y sistema de iluminación
nuevos.
En
lugar de haber repetidos lo que hizo Ford, modificando salpicaderos y costados
con add-ons, adaptando ventilas en su cofre, poniendo gráficos y parrilla distintiva,
los diseñadores de Lingelfelter decidieron ir un paso mas allá y modificar el
frente.
Aparentemente
se intento darle una imagen agresiva modificando la parte superior de los faros
delanteros que es originalmente horizontal. Evidentemente crear unas lámparas
diferentes hubiera generado altos costos, por lo que decidieron cambiar el
cofre pero para complementar esta modificación se vieron obligados a cambiar y
la parrilla y la barra de defensa.
¿El
resultado? Mecánicamente no es superior a la Raptor pero mejora las capacidades
de la Silverado, pero el resultado de la imagen es tan mala que la única persona
que se vería bien manejándola sería el Tío Jessie de los Duke de Hazzard.
El
frente en ángulo negativo no corresponde con las líneas verticales de 90 grados
de todo el vehículo. Si alguien quiere una Silverado todo terreno de
Lingerfelter, la mejor opción será solo comprar la modificación mecánica y
dejar ese lamentable frente para otra ocasión.
Créditos:
Fuente
e Imágenes: Lingelfelter Site.