Si
algún diseñador pudiera elegir un personaje con una trascendencia notable en el mundo
motor, sin duda pensaría en Marcelo Gandini. Porque en los diseños de los autos
que marcaron una época, muchas veces, la pluma de Gandini definió el estilo estético.
Gandini
nació en Turín en agosto de 1938. Sus aportaciones en cuanto a diseño han
abarcado diversos campos, pero fue el automotriz el que marco su obra y la
trascendencia de sus aportaciones haciéndole un hombre notable.
La
trayectoria de Gandini está ligado a varios de los nombres más influyentes del
diseño italiano; Substituyo a Giorgetto Giugaro en Bertone, y con el tiempo su
influencia fue tan grande, que se volvió diseñador independiente colaborando
con diferentes marcas y firmas en modelos muy variados que van desde el diseño
conceptual deportivo hasta modelos compactos.
De automóviles de uso diario y estética
básica, hasta iconos exóticos que dieron identidad a marcas completas.
Gandini
tuvo un enfoque futurista del diseño automotriz. Fue uno de los primeros
visionarios que considero la aerodinámica en tiempos que el diseño automotriz
comercial no soñaba siquiera con esto como factor estético.
Sus
primeras colaboraciones se dieron con Alfa-Romeo con el Alfetta y el Montreal. Este ultimo un concepto presentado en 1967 en Canadá (Montreal).
En este modelo
para Alfa, Gandini participa como parte de Bertone. Aunque el modelo de producción
se diferencio del concepto básicamente en el frente, la disposición del poste C
y la configuración de sus ventanas influirían en diseños posteriores de
Gandini.
Otro detalle que Gandini llevaría al futuro, seria la toma de aire
tipo NACA en el cofre.
También
participo con Bertone en el diseño de un encargo para una empresa italiana, el
Resultado: el Lamborghini Miura.
Diseñado
por un joven e inquieto Gandini en apenas días, el Miura es hoy día reconocido
como uno de los autos más bellos de todos los tiempos y el modelo que por
primera vez demostró a Ferrari que no era la única escudería Italiana de
grandes vuelos.
Las claves del diseño del Miura inspiradas en el Montreal son
obvias.
En
1968 sus trazos resultaron en el diseño del Carabo, un deportivo futurista con
motor central trasero Alfa. Solo se construyo un auto y su diseño tomo menos de
tres meses, pero sentó las bases visuales del auto que unos años después definiría
el término: exótico italiano.
En
los 70’s y aun como colaborador de Bertone, participo en uno de los modelos de
Ferrari menos conocidos, el Dino 308 GT4, un pequeño coupe 2+2 de Ferrari que sentó
las bases del lenguaje de diseño para futuros Ferrari, pero que en si mismo
nunca alcanzo la notoriedad.
La idea jugaba con muchas claves esteticas al mismo tiempo,
por lo que la imagen lucia confusa: Un coupe tratando de ser un bi plaza, o
viceversa.
También
a inicios de la década de los 70, definió el deportivo compacto con el Fiat
X1/9, un diminuto coupe de motor central de frente de cuña y diseño futurista
que encanto a los italianos.
Contrario al Dino, la idea de Ferrari es aquí llevada
a lo que realmente debía de haber sido; un pequeño biplaza deportivo y angular.
En
1971 Gandini retomo algunas ideas que ya había utilizado en el pasado. Las refino
y se presento el concepto del Lamborghini Countach; el LP500, prototipo que definió
para muchos al auto más bello de todos los tiempos; el Countach.
El
prototipo mostraba ideas ya vistas en el Carabo: un frente agudísimo en forma de cuña,
aguda y baja que se prolongaba en el parabrisas muy inclinado y caía suavemente
en la parte trasera gracias a los lomos elevados en sus costados.
Los
cortes inclinados en los arcos de las ruedas traseras otorgan dinamismo a un
perfil pulcro, limpio.
La
parte trasera era dramática. Nunca antes vista. La geometría simétrica domino
las formas angulosas de una manera armónica, elegante pero agresiva.
Este
concepto elevo el diseño automotriz a la categoría de arte.
Lamborghini
mejoro lo aparentemente perfecto para la versión de producción del Countach con
reformas a las tomas de aire posteriores, agregando hermosos inlets tipo NACA laterales y
manteniendo la forma y perfil inalteradas.
Hay
que señalar que dentro de los fanáticos que el Countach le gano a Lamborghini, había
uno muy destacado; Lee Iaccoca.
Gandini
también contribuyo en el serie 5 de BMW diseñando el chasis de su primera generación.
Colaboro también en el diseño del Citroën BX, un hatchback de diseño
vanguardista, líneas rectas y cortes angulosos.
En
1980 Lamborghini fue comprada por Chrysler, debido a la admiracion del entonces entoces CEO del Pentastar, Lee
Iaccoca, un
viejo fan de Gandini y que sabia que los diseños del maestro italiano eran el alma de Lamborghini.
Este ultimo tambien llevo a la producción el Lamborghini Diablo basado en un diseño y concepción
de Gandini.
Gandini por cierto, nunca estuvo de acuerdo con el resultado final. Su idea de lo que deberia ser el sucesor del Countach estuvo retratado en el Cizeta-Moroder.
A
mediados de los 80 participo en la revolución del Hatch europeo subcompacto con
su aportación al Renault 5 II (Supercinco), que fue uno de los primeros
ejemplos europeos de diseño evolutivo para autos de volumen. El 5 II no se
apartaba de la estética del anterior modelo, simplemente evolucionó su imagen y
prestaciones a los requerimientos del mercado permitiéndole competir contra
rivales más actuales como el Opel Corsa.
En
1990 Puso su firma estética en la única revisión del diseño del De Tomaso
Pantera.
El Pantera 200 fue una evolución estética que intento poner al día al
Pantera. Desafortunadamente, la baja producción del Pantera lo hizo un modelo
escaso.
Por si todo lo anteriopr fuera poco, tambien participo
en el diseño del Bugatti EB110 que marco el retorno de Bugatti a la vida.
Entre
otros modelo notables está surgidos de la pluma maestra de Gandini, se cuentan el de los Espada y Jarama de Lamborghini, el Stratos
de Lancia, el Quatroporte II y IV de Maseratti.
En
efecto, el diseño automotriz no es cosa de una sola persona, hay cientos o
miles de factores que influyen en la decisión de cómo un auto debe lucir, pero
si hay un héroe, un solo hombre que ha influido en la manera que los autos
lucen, este es sin duda Marcello Gandini; ¡Un Rockstar!
¡Gracias Marcello!