Estrenado este 2019, vale la pena mirar un poco
atrás para compartir lo que nos pareció estéticamente desafortunado en las
salas de exhibición de los fabricantes de autos durante el 2018, que nos dejó
sin Marchionne, le privo de la libertad a Ghosn, GM y Ford anunciaron la muerte
del sedán americano y además el General anuncio el cierre de varias de sus
plantas en Estados Unidos.
¿Qué más salió mal?
En fin, que no podemos decir que el 2018 fue un
buen año, pero simplemente dejo ver los vientos y relámpagos que anuncian la
tormenta que antecede a una de las más grandes revoluciones desde que se inventó
el motor de combustión interna.
A pesar de lo anterior, hay que reconocerlo, hay
marcas que piensas que el consumidor no les merece buenos productos, bueno
incluso algunas marcas ni siquiera creen que merezcamos productos al menos
atractivos y en algunos casos un contador preocupado por los gastos, o un equipo
de diseño desesperado por las ordenes de diseño innovador de la alta gerencia,
puede producir coches feos.
10º Lugar: Dodge
Attitude/Chevrolet Aveo
No solemos otorgar empates, pero en este caso
nuestro equipo estuvo de acuerdo en que tanto el Dodge Attitude y el Chevrolet
Aveo tienen los méritos suficientes para estar aquí.
He aquí el por qué:
He aquí el por qué:
Entendemos que cuando se produce un auto
subcompacto la prioridad será siempre un precio final bajo. Persiguiendo este objetivo
se sacrifican muchas cosas; Equipamiento, prestaciones, calidad de materiales y
evidentemente imagen.
Tanto Dodge como Chevrolet tuvieron en el Aveo y
Attitude los ejemplos menos agraciados. Parece que ambas marcas se fueron de
compras a China y apenas tuvieron tiempo de ponerle una parrilla y un emblema
de su marca a cada auto, lo cual es aún más evidente en el Attitude.
Ninguno de los dos subcompactos refleja por mucho
la imagen de su marca, al contrario, la demeritan.
Ambos son feos y mal hechos por dentro y por fuera.
Ambos son feos y mal hechos por dentro y por fuera.
9º Lugar: Smart Fortwo
Sin embargo, los nano compactos en los que el
precio no es prioridad cometen también errores estéticos. En este caso
estuvimos de acuerdo con que el micro auto de Smart evoluciono su imagen
negativamente en esta, su más reciente generación.
Tanto al frente como en la parte posterior las
ruedas parecen empujadas hacia afuera de las esquinas del auto lo que provoca
extrañas protuberancias al frente y detrás de ruedas delanteras y traseras.
De perfil, la parte delantera es completamente
plana y cercana, peligrosamente cercana a la base del parabrisas. Mientras en
la parte posterior, las ruedas parecen ser parte integral del refuerzo de la
defensa al estar más allá del alcance de la carrocería.
La parrilla delantera, faros, luces de estacionamiento, manijas exteriores de puertas parecen accesorios baratos, agregados de último momento. Le resta integridad a la imagen.
Por el precio del Smart puedes obtener autos más
amplios, seguros, y agradables a la vista. Además, nadie te mirara con una
sonrisa torcida y burlona al pasar.
8º Lugar: Jeep Renegade
Cuando las grandes marcas comparten plataformas,
generalmente, estas se aprovechan para ofrecer productos muy variados, pero
utilizar una plataforma Fiat y vestirla de Jeep es doloroso incluso para
quienes no somos fans de Jeep.
Parece que FCA creyó que, adaptando la tradicional
parrilla de 7 tomas verticales de la marca, unos faros redondos que recuerden al
Wrangler, un poste C ancho, fuerte y en ángulo recto como alguna vez lo uso la
Commander, unos arcos de rueda de parte superior plana a la Grand Cherokee y un
cristal trasero vertical, además de lámparas traseras cuadradas, creeríamos que
se trataba de un Jeep; Solo quienes manejan un Renegade lo creyeron.
Siendo sinceros, algunos de los modelos más
emblemáticos de Jeep no fueron ejemplos estéticos, su belleza radica en la
pureza de propósito del diseño; Vehículos todo terreno de uso rudo y
confiables. Sin esa pureza de propósito y rudeza un Jeep no puede llamarse
Jeep.
FCA intento que sus diseñadores incluyeran tantas
claves de diseño en un auto tan compacto que el resultado tenía que ser poco
afortunado. Pero probablemente lo más feo, es que FCA quiera hacernos creer que el Renegade merece portar el emblema de Jeep.
7º Lugar: BMW i3
Hace tiempo que parece que BMW perdió ese fino
toque de diseño sobrio pero deportivo que lo distinguió en décadas anteriores,
pero de allí a creer que algún día podría producir algo tan feo como el i3 hay
un mundo de diferencia.
Parece que algunos fabricantes tienen como
requisito que sus híbridos deben ser feos, y el i3 es el ejemplo perfecto. El
frente parece una broma cruel al adaptar la tradicional doble parrilla de la
casa bávara apenas con una simulación de molduras en un cofre diminuto. Si ya
sabemos que los mismo sucede en el i8, pero hay una diferencia abismal en el
diseño entre ambos modelos.
El perfil del diminuto eléctrico es lo más desafortunado.
Tener puertas traseras suicidas puede ser practico, pero una línea inferior de
las ventanas traseras en diferente plano a las delanteras es algo absurdo. Interrumpe
la fluidez de las líneas laterales y distrae la atención. Rompe el pequeño auto
en dos.
La parte trasera con terminado acristalado, luce
extraña; plana y sin integrase a los costados.
Es doloroso leer los textos de la web de BMW
tratando de explicar la “belleza” del diseño exterior, cuando evidentemente, esto es
algo que no existe.
6º Lugar: Infiniti QX70
- ¿Qué tal si a un SUV le ponemos un cofre y frente
de muscle car? -
Este tipo de preguntas puede ser común en el equipo
de diseño de una marca que busca ser innovadora. Lo increíble es que nadie se
hubiera dado cuenta de que no era una buena idea antes de que algo como el QX70
rodara en libertad por las calles.
El QX70 parece la mamá de un Nissan Juke. ¡Así de
fea es!
Su cofre abombado y extremadamente largo esta fuera
de proporciones con el resto del vehículo. Este efecto se ve acentuado por el
arco superior de las ventanillas laterales baja y corta y fuera de contexto.
La parte trasera es la mejor lograda, pero no es
suficiente para salvar el conjunto estético.
Además de feo, el QX70 alcanzo ya su ciclo de vida y
esperamos, por el bien de nuestros ojos, que Infiniti no repita estos errores.
5º Lugar: Renault Twizy
Perdido en algún lugar entre los nano compactos y
el segmento de los carros de pedales, el Twizy de Renault es demasiado
innovador como para que además pueda ser estético.
Si además de las limitaciones de carga, pasajeros,
seguridad, prestaciones e imagen que el pequeño eléctrico de Renault presenta
tomas en cuenta que por su precio puedes aspirar a un sedán o un SUV pequeño a
gasolina de buen nivel de otras marcas o incluso de Renault mismo, el micro
eléctrico francés además de feo carece de sentido alguno.
El Twizy tiene una estética tan desafortunada que
alguien que te vea llegar en ese auto difícilmente podrá tomarte en serio.
4º Lugar: Chevrolet Cavalier
La parte fea del Cavalier empieza por el nombre.
Utilizar un nameplate de un auto que nunca se distinguió por su buen diseño y
retomarlo 20 años después, no augura nada bueno. Además, General Motors siempre
se ha hecho competencia a si misma por la escala de equipamiento y precio que
aplica a las mismas plataformas en sus diferentes marcas, pero este Cavalier está
muy forzado actualmente dentro de la gama de Chevrolet. Talvez con la cercana
desaparición del Cruze, GM busca llenar este nicho.
Lamentablemente el Cavalier parece una copia pirata
del Cruze.
Interiores muy coreanos, exteriores carentes de caracter
y pasados de moda hacen que el Cavalier sea escaso en las calles.
Hay otra parte muy fea de este auto: ¡El precio!
Hay otra parte muy fea de este auto: ¡El precio!
3er Lugar: Fiat 500L
El 500L demuestra una clara crisis de identidad en
Fiat. Si el 500 resulta simpático, retro y femenino, el 500L pierde este
encanto y trata de convertirse en un Mini Countryman.
El 500L utiliza la siempre fallida receta de 6 lámparas
en el frente, que siempre hace lucir feo a un auto, copia los esquemas
bicolores de Mini, los interiores son dolorosamente simples y el corto cofre lo
hace lucir como si el diseñador hubiera cambiado de idea a mitad del trabajo.
El 500L es un vehículo italiano tratando
desesperadamente de ser inglés.
2º Lugar: Nissan Juke
Con un aspecto parecido al de un pez sapo
(inflado), el Juke es notoriamente feo.
El pequeño SUV de Nissan pasara a la historia en un lugar muy cercano al Pontiac Aztek en el recuerdo de las abominaciones del diseño automotriz.
El pequeño SUV de Nissan pasara a la historia en un lugar muy cercano al Pontiac Aztek en el recuerdo de las abominaciones del diseño automotriz.
Las claves de su horrible diseño son:
6 luces al frente, una solución que en ningún vehículo
se ha resuelto de manera afortunada.
Líneas de carácter en su perfil que remarcan los
arcos de rueda y que están fuera de proporción contra el tamaño total del vehículo.
Línea descendente del toldo, que puede lucir bien
en el GT-R, pero nunca en un SUV compacto.
Una muy forzada adaptación de lámparas de bumerang
en el frente y la parte trasera, que, si bien pueden ser parte del lenguaje de
diseño de Nissan, lucen fuera de lugar en este vehículo.
Uno de los pocos errores de diseño de Nissan en la era Ghosn.
1er Lugar: Toyota Prius
Si tienes un Prius le demuestras al mundo que eres
un vanguardista, con conciencia verde, preocupado por los recursos del planeta,
pero con un pésimo gusto en autos.
¿Qué tan feo consideramos al Prius? El primer lugar
debe indicarte algo. De hecho, consideramos que no hay nada más feo actualmente
en las calles. No, ¡Ni siquiera un Aztek viejo es tan feo como el Prius!
Toyota está mejorando el diseño de sus vehículos,
pero parece que en el caso del Prius, los nipones quisieran demostrarle al
mundo que sus autos son tan confiables que la gente los compra no importa que
tan feos sean.
Los tiempos de los híbridos feos están quedando
atrás, muestra de ello es el Hyundai Ionic e incluso el Chevrolet Volt.
¿Por qué hacen al Prius tan feo Toyoda-San?
¿Por qué hacen al Prius tan feo Toyoda-San?
El frente del Prius es una oda al mal gusto. Los
angulos afilados en su diseño están fuera de toda tendencia y las lámparas
trasera son un trofeo al mal gusto.
Si bien el tren motriz del Prius casi no contamina,
su diseño e imagen es contaminación visual pura. Lo único más feo que el Prius
puede que se aquella novia tuya de la secundaria.
¿Entiendes el punto?
Créditos: Imágenes: Chevrolet.com, Daimler, Jeep Europa, BMW Group, Renault Press, Chevrolet.com, FCA Press, Toyota Motor Company.