Mientras por ejemplo un auto francés en América, es un dolor de cabeza, sin importar que marca sea, en Europa es muy extraño ver autos japoneses, y en Asia es más fácil ver a un japones con afro natural, que ver un muscle car.
Cada marca tiene a su favor, su propio territorio al que da prioridad nos guste o no. Pero ese publico ingenuo que piensa que todos los coches son iguales y que es igual de económica una parte de repuesto hecha en Seúl, Francia, España, Estados Unidos, Brasil o algún lugar de Mexico. Tiene la divina cualidad de comprar autos del mas reciente modelo, ese que nadie tiene aún, sin importar que tan mal ensamblado este y por tanto que tan poco confiable sea. Dejándose llevar por la prensa “cuenta air-bags” que cree que un auto es mejor si tiene más bolsas de aire, o de acuerdo al tamaño de la pantalla de multimedia.
Sin saber que a la primera descompostura por garantía pasará mas de 30 dias con el auto en el taller en espera de la parte de repuesto, exigiendo a un gerente de ventas indolente y prepotente que le facilite un auto substituto (Que no le prestarán, porque es el que usa la secretaria favorita de alguien en el concesionario), o que le cambien el auto por uno nuevo, sin saber que es más fácil que usted se saque la lotería, que un fabricante de autos le cambie su auto por uno nuevo.
Pues esos ingenuos estarían felices de conocer Lynk&Co, un nuevo fabricante de autos que quiere hacer las cosas diferentes. De hecho tan diferentes que puede ser muy difícil de digerir.
Pero por ejemplo te platicamos que Lynk no tiene concesionarios, sino clubes en algunos sitios de Europa en los que puedes ir a pasar el rato como si se tratara de un Starbucks. Actualmente solo en Holanda, Alemania, Bélgica y Suiza. Asi que si estas en otro continente, y eres de los amantes de pasar toda una tarde con un café y robándote el wi-fi del local, ¡Tranquilo vaquero!: aún no están en América.
Además de algunas utopías socialistas, como aquella de planes para compartir autos y que con esto tengas que pagar menos.
¿Pero realmente funciona? No lo sabemos, es muy rapido para saber si un negocio de este tipo puede funcionar con un nivel de idealismo absurdo tan alto en una industria en la que el financiamiento y flujo de efectivo es vital.
Pero debemos reconocer que sus autos son diferentes.
Y para muestra el Lynk&Co 03+ Cyan Edition. Presentado en el Chengdu Motor Show 2021.
Este auto, que es el modelo mas vendido de la marca en China. Solo por si te preguntabas acerca del origen de la marca, celebra el triunfo de Cyan en el campeonato de la FIA de World Touring Car Cup. Si señor, el engendro este, también ha ganado carreras.
El auto es extraño en demasía. El frente, específicamente las lámparas delanteras y la parrilla, lucen como una copia a escala de la de un Dodge Charger, las extrañas luces sobre los salpicaderos nos recuerdan al Kia Sportage de modelo anterior y al Nissan Juke también de pasada generación. El perfil luce muy Volvo: rígido y anticuado. Y el azul Cyan recuerda a Polestar, marcas por cierto, propiedad de Geely, también China.
¿Tienes un Volvo y creías que era europea? ¡Ups! Lo sentimos, Volvo es más china que una galleta de la suerte. A pesar de que el concesionario le pego a tu SUV Volvo una bandera sueca.
Pero volvamos con el 03+, la parte trasera es fea. ¡Muy fea! No sabemos si vale la pena siquiera describirla, pero si al mal diseño le sumas un alerón incrustado sobre la tapa de baúl trasero, la mezcla es un homenaje al mal diseño automotriz.
Es tan feo como un Hyundai Creta actual o un Pontiac Aztek. Tan feo como el Precio de un León Cupra, o el azul mate del Formentor. Tan feo como una Chevrolet Captiva 2021, un Beat o casi tan feo como un Toyota Prius. Es tan feo, que incluso un BMW Serie 4, con su parrilla de bigote hitleriano, no parece tan feo.
Pero claro esta que si a ti te gusta lo diferente, lo nuevo, lo que nadie tiene. No te importa que se rían de tu auto a tus espaldas y crees que un concesionario puede ser un club social.
¡Adelante campeón! Sorpréndenos.
Créditos:
Imágenes: Lynk & Co