Muchos años después de que Akio Toyoda y su gigante automotriz demostraran al mundo que, el prestigio de marca puede vender el automóvil mas horrible, parece que el cielo escuchó nuestras súplicas y nuestros atormentados ojos tienen la esperanza de no ver mas circulando por las calles el horrendo Prius de la actual generación.
Según Toyota, este nuevo automóvil llega “Just-In-Time” para el siglo XXI, pero muy tarde para las pupilas de quienes nos topamos con los actuales híbridos japoneses.
Después de tres horribles
generaciones, y 25 eternos años de tormento visual, este nuevo Toyota estrenará una planta de poder de 1.8L, y se montara sobre la plataforma TNGA (Toyota New
Global Arquitechture).
Dejando la información técnica de lado, habría que replantear el termino "Just-In_Time" de Toyota, porque fueron 5 lustros de un auto muy feo. Pero ahora el gigante nipón esta consiente de que el hecho de que el Prius sea un automóvil hibrido, ya no es argumento suficiente para seguir vendiendo adefesios. La competencia ya está produciendo y vendiendo automóviles híbridos con imagen inmensamente mas aceptable que la del Prius, y si Toyota quiere que su auto se siga vendiendo, es hora de dejar los malos chistes estéticos que plagaron la imagen del Prius y diseñar un automóvil en serio.
Y hablemos de el:
El frente de este nuevo concepto, abandona las líneas elípticas, ángulos agudos, y faros absurdamente feos y deformes y pone en su frente una parrilla inferior horizontal, discreta y podríamos decir que incluso tímida.
Por encima de la fascia y a cada lado, siguiendo la tendencia coreana de replantear la forma de las lámparas automotrices, Toyota monta un par de lámparas en forma de C a cada lado. La parte inferior de estas recuerda ligeramente a las del Corolla actual.
El perfil parece una copia del
auto de primera generación, cuyos volúmenes están tan difuminados uno sobre el
otro, que desde este punto de vista el auto podría ser clasificado como
bi-volumen. Solo el cofre parece ser un volumen independiente de los demás. Pero no te engañes, la verdadera inspiración para este auto no es la primera generación del Prius.
El dinamismo mejora por varios factores. Revisemos. Las ruedas de un radio mayor, hacen desaparecer esa sensación que siempre existió con Prius de generaciones anteriores de que la plataforma del auto era muy pequeña para la carrocería.
Esta nueva imagen de mayor radio
en las ruedas es en parte una ilusión óptica amplificada por las molduras de
arco de rueda en negro que engañan al ojo haciendo creer que las ruedas son aun
mas grandes de lo que en realidad son.
La moldura de estribo, al mas puro estilo japones que se inventa líneas de carácter donde no son necesarias, “parte” a la mitad la parte baja del auto y toma una dirección ascendente hacia atrás que incrementa la percepción visual de que la rueda trasera es más grande.
No esta mal, pero no sirve absolutamente de nada. Este tipo de detalles inútiles es parte de la filosofía de diseño japones.
El resto del perfil es muy limpio. Se nota una influencia de Mazda en esta limpieza que raya en la austeridad.
Por increíble que parezca (En un Prius) el costado trasero presume un discreto volumen que le da el mismo musculo que tu sientes haber ganado después de tu primer día en el gimnasio. Otra copia del Mazda 3 Hatchback llevado a su mínima expresión.
El horizonte de las ventanillas laterales es ascendente, lo que le otorga dinamismo a una imagen que de otra manera seria tan aburrida como la de… ¡Un Prius actual!
El parabrisas muy inclinado, la cabina de pasajero recorrida hacia atrás y la suave caída del cristal trasero recuerda sin duda a… ¡Adivinaste! Mazda 3 Hatchback, pero de pilas.
La parte trasera merece la pena detallar varias mejoras:
Toyota por fin se decidió a eliminar el cristal trasero doble, copia de la Pontiac Aztek. ¡Alabado sea Dios! Queda claro que Akio debió de haber amenazado a sus diseñadores con cortarles el meñique, esconderles el Nintendo o prohibirles ver manga con tal de eliminar este asqueroso rasgo de diseño. Pero funcionó, y este nuevo Prius tiene un cristal trasero enorme pero de una sola pieza.
De acuerdo a lo que dictan los cánones de la moda automotriz, las lamparás traseras son una línea horizontal ininterrumpida de lado a lado. Y mas vale que nos acostumbremos porque esta tendencia invade ya todos los segmentos automotrices.
La parte trasera podrá ser el ángulo de mayor mejora en general pero un diseñador desafió a Akio y decidió poner esas espantosas “lagrimas” laterales descendentes. Tampoco sirven de nada, pero ese uno de esos rasgos estéticos que alguien en el departamento de diseño de Toyota cree que forma parte de la identidad de marca y que seguirá contaminando visualmente sus modelos por un tiempo más.
Un detalle en contra es que, visto desde atrás, el auto sigue luciendo muy angosto con respecto a su altura.
La mecánica Toyota, confiable y rendidora, por fin esta envuelta en una carrocería que no te hará ver como un payaso de fiestas infantiles. La imagen de uno de los híbridos más populares alrededor del planeta ha sido dignificada. Sigue teniendo identidad nipona, pero la discreción le da ahora una identidad seria que el auto necesitaba urgentemente desde hace 25 años.
Es claro que se tomó como inspiración el Mazda 3 Hatch para darle un poco de espíritu al este Prius, que luce muy cercano a la producción. Y en la medida de lo posible, Toyota, o BMW, lo lograron.
¿Lo compraríamos?
Bueno, una cosa es decir que si tu amiga la fea se lava la cara y se maquilla un poco se verá menos fea y otra es que estes dispuesto a casarte con ella.
En principio habría que ver qué tanto de este prototipo llega a producción, segunda, habría que ver que tanto quiere Toyota exprimir tus bolsillos por un auto que no es tan feo como el anterior, tomando en cuenta lo que muchos ingenuos pagaron por un horrible Prius de generaciones anteriores.
Pero honestamente, nosotros no lo compraríamos. Precisamente porque el Prius ha sido, hasta ahora un mal chiste estético, un auto muy feo. Mientras quienes compren un auto no entiendan que por lo que pagas mereces un mejor diseño, además claro está, de una buena mecánica, las marcas seguirán produciendo coche muy mal diseñados.
Pasarán muchos años, se necesitarán mucha dignidad estética, y mejorar gradualmente las próximas generaciones de este modelo para olvidar que el Prius ha sido el sinónimo de la fealdad, un ejemplo de exceso estético, uno de los coches mas feos de las últimas décadas.
Créditos:
Imágenes: Toyota.