La realidad nos alcanzó; Las SUV
son los vehículos del futuro. Las plantas de poder eléctricas ya están aquí y
la polémica parrilla de BMW sigue mostrando su horrible presencia en cualquier
modelo nuevo de la marca bávara.
La reciente presentación del BMW iX, nos muestra una propuesta que, al igual que el Nissan Z Proto, es un modelo aun en etapa de pre-producción basado en el BMW i-Vision NEXT, pero que tendrá que pasar aun por algunas etapas finales de revisión para su versión de producción, que pueden cambiar sustancialmente lo que BMW nos deja ver.
Quisiéramos que la horrenda
parrilla que es la principal característica de la nueva tendencia de diseño no
estuviera allí, ¡Pero esta! Y no vamos a aburrirte más diciéndote que es fea,
desproporcionada, que rompe con las líneas del vehículo, que parece un bigote
de Hitler, que es más fea que la parrilla de un Aztek o la no parrilla de un Prius.
No hay necesidad. Tú mismo la puedes ver.
En esta ocasión omitiremos esas obviedades,
señalando únicamente que, no hemos escuchado a nadie aun, a quien la nueva cara
de los modelos BMW le parezca
atractiva. Dicho lo anterior, te dejamos las fotos del frente de esta nueva SUV
mientras nos mantenemos en completo y absoluto silencio.
Ahora bien, la parrilla en cuestión,
dado que se trata de un vehículo eléctrico, está completamente sellada. Detrás de
la superficie transparente de la misma, se montan una serie de sensores y cámaras
que darán servicio al conductor.
BMW dice en sus boletines de prensa que el vehículo, que presenta
las más avanzadas tecnologías de movilidad eléctrica está diseñado desde
dentro, con la finalidad de maximizar la habitabilidad y comodidad de los
pasajeros. Lo que se logra, como en todos los vehículos de su tipo, gracias a
la disposición de las plantas de poder que permiten mayor y mejor
aprovechamiento del espacio interior.
En cuanto a su imagen, el BMW iX muestra el lenguaje de diseño de la
casa, con todo lo que esto implica; No la gente de diseño de BMW no se corrige.
Al frente, salvo la masiva simulación
de parrilla, las líneas de otros modelos de la marca han sido suavizadas. Hay
mil maneras de mejorar la imagen frontal, pero la temática relacionada a la
parrilla rompe cualquier fluidez de líneas.
El perfil tiene efecto residual
de algunas claves del i3. Pero se mejoró
para no caer en las excentricidades del compacto. El perfil es limpio y
discreto. Los volúmenes sobre los arcos de ruedas brindan peso al diseño. El
poste D flotante, recuerda al i3.
Si BMW hubiese evitado este detalle, el Poste D sería muy poderoso.
Pero BMW cayó en el juego de las
tendencias y repite lo visto en muchos modelos de SUV´s.
Lo mejor es la vista trasera que
rompe con el exceso de la serie X de
la marca y nos presenta un trasero limpio y realmente minimalista. Las lámparas
son una interpretación exitosa de la tendencia de la marca en estos elementos.
Las molduras sobre el difusor trasero, que simulan las salidas de escape son innecesarias.
Podrían desaparecer para el vehículo de producción y nadie las echaría de
menos.
Las tapicerías tienen un esquema
novedoso y textiles que parecen ecológicos. Parece poco probable que llegue a producción.
Las cabeceras delanteras tienen una imagen aún muy poco elaboradas y dan la sensación
de estar mirando el volante, lo que no parece que sea ergonómicamente correcto para
el pasajero o para cualquier humano que camine medianamente erecto.
El tablero cumple con las
tendencias de los vehículos eléctricos. Las enormes pantallas que sustituyen el
tablero de indicadores análogos son notables por su tamaño. El minimalismo de las salidas del
sistema de climatización interior en el tablero central es excelente y muy estético..
El volante en un diseño casi
hexagonal, parecería más para un Lamborghini
Aventador, que para un mama-móvil eléctrico. No hay congruencia visual con ningún
otro elemento del diseño interior. Esperamos que BMW ponga en su modelo de producción algo menos excéntrico.
¿Qué tan bien le puede ir en
ventas?
La guerra de los SUV´s eléctricos
esta aun por comenzar. Los precios, ofertas y posicionamiento de marca darán un
vuelco a la percepción que los clientes tienen, no solo de la oferta de vehículos,
sino de la misma conveniencia y prestigio de las marcas.
Juzgar lo que pasara en los
mercados con ofertas tan novedosas cambiara lo que actualmente entendemos como
el liderazgo automotriz. Sentemos a esperar. La lucha será sangrienta.
BMW por su parte tiene mucha experiencia en este sentido. Con un
poco de tiempo mejorara algunos aspectos estéticos que están marcados un punto débil
en su imagen de marca. Entendamos que BMW nunca ha sido, ni pretende ser una marca de volúmenes masivos. Su nicho de
mercado es el segmento alto. Y allí será la cartera la que manda, pero hay que
tomar en cuenta, por ejemplo, que Tesla,
Porsche, Ford o General Motors, ya
tienen modelos, o lanzaran en el corto plazo, SUV eléctricos con mejores
parrillas.
¡Aun estas a tiempo BMW!
Créditos:
Imagénes: BMW