En 1969 Nissan dio inicio a la leyenda del auto Z, no sin antes pasar algunos problemas como el hecho de que, en su inicio, Nissan recurrió a Yamaha para el diseño del auto, pero debido a que el resultado no convenció a los directivos de Nissan, el proyecto se ofreció entonces a Toyota y resulto en el ya legendario 2000GT (El abuelo paterno del actual Supra, cuyo padre actual es BMW).
La intención de Nissan en aquel entonces, era desarrollar un vehículo de halo que demostrara las capacidades técnicas de la marca japonesa.
El resultado fue el 240Z (S30). Aunque las versiones para Asia y América variaban en algunas de sus características y mecanicas, el resultado fue el que Nissan esperaba: Un coupe deportivo, atractivo, relativamente potente y accesible.
Este modelo sentó las bases estéticas del ahora legendario Z: frente agresivo, cofre largo, habitáculo pequeño y práctico, costados cortos, musculares y agresivos, cristal trasero de caída prolongada y luces traseras dobles en disposición horizontal.
El rasgo más característico visualmente del primer Z, es el housing de sus lámparas delanteras, que, a pesar de montar unidades selladas redondas, la disposición estética alrededor de estas, le concedía un dinamismo pocas veces igualado en algún otro vehículo. Albergaban las luces de manera elegante y formaban a la vez el marco de un parrilla inclinada en contra angulo.
Profundo, agresivo, dinámico y extremadamente vanguardista para su tiempo. El frente del Z sumado al perfil de su habitáculo, estaban tan magistralmente ejecutados.
La siguiente generación, el 280ZX, conservo únicamente la transmisión de la primera generación.
Todo lo demás fue completamente nuevo y aunque conservo parte de la personalidad (lease el housing de las lamparas delanteras), perdió la grácil estética del modelo antecesor.
Se volvió más sofisticado, pero también más pesado y por tanto menos ágil. El incremento de su talla deformo el frente. Los requerimientos de seguridad le impusieron una defensa delantera prominente y voluminosa.
El alargamiento se extendió hasta la parte trasera donde los costados perdieron musculo y la ventanilla trasera crecio en talla para mejorar la visibilidad pero dio al traste al poste C.
El 300ZX (Z31), fue víctima de la tendencia de los 80's.
Líneas rectas, faros rectangulares semi-ocultos y un costado trasero que parecía más bien de Mazda le han hecho uno de los modelos Z con menos encanto.
Su fascia delantera, al igual que los modelos deportivos de aquellos años, era muy afilado, tan afilado que estaba extremadamente “jalado” hacia adelante. Al igual que el Corvette C4, existía una distancia descomunal desde el arco de la rueda delantera, hasta el frente del auto. Lucia muy alargado, pero tosco.
El perfil tradicional del habitáculo se eliminó, dejando paso a líneas rectas y ángulos rectos.
Los Postes B y C fueron las peor concepción en un Z. la ventanilla trasera “a-la” Mazda de aquellos años, termino por restarle el encanto que le quedaba.
Las lámparas traseras, se influenciaron del estilo de los 80’s, enormes, y si, en disposición horizontal, pero con esa extraña sensación de que fue lo que menos empeño requirió por parte de los diseñadores.
La distancia desde el arco de rueda trasero hasta la defensa trasera, es también enorme. Proyectando la sensación de que el automóvil requería una distancia entre ejes mucho mayor. Como si la carroceria estuviera montada en una plataforma varias tallas menores.
Este será por siempre, el menos clasico de los autos Z.
El 300ZX (Z32) fue uno de los pasos evolutivos más importantes para el Gran Turismo de Nissan.
Sentó las bases para las tendencias de diseño de muchos deportivos.
Suavizo todos y cada uno de sus ángulos, mejoro exponencialmente sus terminados y materiales, dando a sus interiores un nivel de calidad más alta y dio impulso nuevamente a la imagen de Nissan.
Fue tal el salto cuántico, que en el momento de su lanzamiento, muchos no creían que realmente se tratara de un auto de la marca. El frente era muy agresivo y suave.
Nissan reinvento exitosamente las lámparas delanteras y volvieron a ser un punto de referencia estético del modelo. También las luces traseras mejoraron notablemente, respetando su herencia genética e integrandolas perfectamente como parte de un "todo" visual.
En el exterior, tal vez la única queja era el arco de las ventanas del habitáculo, demasiado suaves y sin caracter.
Después del exitoso debut, el auto se dejó de vender en algunos mercados. El impulso dado a la marca por el vehículo, se desvaneció lenta y dolorosamente.
Siendo muy recientes para ser clásicos y muy viejos para inspirar al público objetivo del segmento, los Z32 perdieron valor, y exclusividad. Su precio se desplomo y aun es común verlos por las calles circulando ya en estado lamentable.
Pero los que aún se conservan tardaran todavía años para que se conviertan en objetos de culto.
350Z (Z33)
Con la llegada de Carlos Ghosn a Nissan (y Renault), el otrora titán de la industria reconoció la importancia del Z dentro del portafolio de la marca. Para este nuevo vehículo se convocó a los estudios de diseño de la Alianza Nissan-Renault en Europa y América.
El resultado fue excelente. El auto se convirtió en un clásico instantáneo: Compacto, muscular, poderoso, elegante y con un increíble y delicioso
sonido producido por su mecánica, el 350Z dejo de lado completamente la
etiqueta de deportivo japonés, para entrar de lleno en la liga de Gran Turismo
Mundial.
La imagen compacta, limpia, agresiva retomo claves de la personalidad del 240Z, sin ser una caricatura retro, como tantas veces se había hecho en aquellos años (Si, los estamos viendo a ustedes VW Beetle, Ford Thunderbird, Chevrolet SSR etc.),
370Z (Z34). Si unas facias diferentes amen de lámparas de bumerang y bastantes ediciones especiales que solo cambian en prestaciones, ruedas, graficos y equipamiento, es suficiente para marcar una nueva generación entonces este es una nueva generación.
Sin mucho que decir porque el auto no ha sido sometido
siquiera a un face-lift como Dios manda.
Nissan ha intentado disfrazar la falta de capacidad evolutiva y distracción de recursos con el GT-R, haciéndonos creer que el Z es el equivalente de Nissan a la filosofía evolutiva del Porsche 911.
¡No hay tal!; Nuevamente el abandono del modelo lo ha sumido en la mediocridad de ventas.
Y un carro que no ha presentado mayores mejoras estéticas en 18 años, en este segmento, es poco menos que una pieza de museo.
Si hoy un cliente potencial de un deportivo de digamos, 24 años, busca un auto, difícilmente será el Z, !Solo ha conocido una generación! y actualmente ni siquiera tiene un sistema de infotainment decente!
Con el agua hasta el cuello desde el Ghosn-Gate, Nissan enfrenta problemas prácticamente en cada frente y le urge mejorar la imagen de marca.
Si, adivinaste, el lanzamiento del tan esperado nuevo Z, será utilizado, una vez más, como punta de lanza para mejorar el posicionamiento de una buena marca, cuyo mayor daño, irónicamente, no ha sido producto de sus autos, sino de sus ejecutivos y sus estrategia “kamikaze” para desterrar a Ghosn y evitar que Renault siga invadiendo el orgullo nipón.
¿Qué podemos (y debemos) esperar de un nuevo Z?
La gente que lo ha visto, porque si hay quien ya lo ha visto, refieren que el auto portara una parrilla cuadrada y que el diseño de sus lámparas estará inspirado en el 240.
Sus luces traseras serán nuevamente horizontales. Pero también indican que el auto luce mucho como el actual.
Esperamos que solo sea que se conserven elementos estéticos que lo identifiquen como un Auto Z, porque si Nissan cree que un lavado de cara será suficiente para el fan hardcore, estan un poco equivocados.
Actualizar el frente es indispensable, y respetar la genética del Z es primordial. Nissan no debe tratar de mezclar elementos del GT-R. Ambos son completamente distintos.
Deberá continuar con las motorizaciones potentes sin ser brutales conservado la agilidad del vehículo. El interior debe ser completamente nuevo. El actual auto muestra severos signos de vejes al interior. Los sistemas de infotainment deben ser los más modernos.
El Clúster de instrumentos, deberá, si o si, ser completamente digital. Los costados no deben alargarse, deben solo actualizarse para mantener el perfil agresivo pero elegante.
Las lámparas traseras de bumerang deberán desaparecer.
En fin, que Nissan tiene mucho por hacer o mejor dicho, por haber hecho y la muestra es este guiño que nos hace el 400Z desde este video del fabricante.
Fuente:
Imagenes y videos: Nissan.
Otras imagenes: Free source.