12 dic 2019

BMW: Crisis de identidad.

BMW ha sido siempre una marca reconocida por sus atributos y excelencia mecánica. Aquel slogan de “The ultimate driving machine” ha sido durante mucho tiempo una frase muy cercana a la realidad.
 
BMW Serie 3 / AutosMk

En la década de los 80 del siglo pasado, BMW demostró, en un mundo dominado por sedanes genéricos, de mala calidad y de imagen decadente, que se podía tener una excelente mecánica y desempeño sobresaliente combinado con un diseño elegante, deportivo, juvenil y atractivo.


Si en aquellos años eras un joven ejecutivo exitoso, la mejor manera de demostrarlo al mundo era manejando un BMW.

Pero si bien, el gusto por el diseño automotriz es una cuestión subjetiva, no podemos separarnos de la idea de que el diseño representa la imagen aspiracional de quien compra ese auto. De allí la importancia del mismo.

Mercedes Benz ha tenido en los últimos años un retorno exitoso en su imagen gracias a una filosofía de diseño propia. Atrás quedaron los Mercedes que eran la reliquia del abuelo, o que solo servían para manejarse a ritmo de desfile. Mercedes transformo su imagen para ser ahora el nuevo auto que representa la opción preferida por jóvenes y no tan jóvenes y que su imagen les representa por igual en cada una de las versiones de la marca.

BMW por su parte, ha estado sumida en una ceguera estética la cual ha hecho que la marca sea causa de burlas. La gente responsable del diseño de la marca allá en Bavaria han querido vestir su derrota estética con argumentos como el “Diseño polémico” en lugar de aceptar que van por mal camino.

Repasemos un poco:

Serie 1: Su más reciente modelo, además de abandonar la tracción trasera, que distinguía a los hatchback de la marca del resto de automóviles del segmento, adopto una imagen de perfil perdida en algún lugar entre los hatch de Volvo y KIA.

BMW Serie 1 / AutosMk

Serie 2: El nuevo Serie 2 es la excepción. Conserva los valores de diseño dinámico pero sobrio de generaciones anteriores del Serie 3 y no sufre del mal de la parrilla montada en el cofre que tanto daño les ha hecho a sus hermanos de series mayores. Estéticamente el único problema del cual adolece es el patrón de las rejillas de sus parrillas.
El diseño sin embargo, no pudo ser coronado debidamente debido a la confusa resolución de la parte trasera.
Desde la vista posterior, hay una severa dosis de líneas y volúmenes que lo hacen lucir más como un pequeño SUV, que como un sedán. Las luces traseras, al igual que todas las de la gama, carece de personalidad.

BMW Serie 2 / AutosMk

Serie 3: Alguna vez considerado el mejor sedan del mundo fue mejorado por BMW al hacerlo invisible. El Sedan de talla media estrella de la marca bávara que en algún tiempo dominaba la vista de las calles y hacia girar miradas, tiene ahora un diseño tan insípido, que no llama la atención. Carece de carácter. Es más genérico que un Honda Accord de los 80.

Serie 4: Carece del mal de la parrilla gigantesca de BMW, pero también carece de todo lo demás.
Si el Serie 3 es invisible, el Serie 4 lo es más no solo por su imagen sino por su limitado volumen de ventas. Tiene tantas ideas estéticas mezcladas en un solo automóvil que no cabrían en su inmensa cajuela. El ejemplo perfecto de un auto diseñado por un comité que no logra la cohesión estética.

BMW Serie 4 / AutosMk

Serie 5: Cuando hablamos de tallas considerables, el Serie 5 de BMW es el mejor logrado. Pero se esforzaron tanto por llegar al público de cierta franja del mercado que el resultado es insaboro, inodoro e insoportablemente gris. 
 
Es el auto perfecto para una flota de vehículos ejecutivos. A todos les gustaría montarse en uno pero a ninguno le gusta lo suficiente para comprar uno de ello.

BMW Serie 5 / AutosMk

Serie 6: Tener como miembro de esta serie al Gran Turismo, ya es lo suficientemente malo como para que sea necesario decir algo más de ello.

Serie 7: Carro grande, parrilla enorme. Alguien en diseño de BMW imagino que un carro con una enorme parrilla al frente y molduras en ángulos de 45 grados demostraría seriedad y majestuosidad. Pero  los ángulos rectos, no combinan con algunas líneas suaves del diseño de sus partes superiores. La co tunfusión estética se hace más evidente en la parte trasera, la cual incluso en las páginas de BMW intenta ser disimulada.

BMW Serie 7 / AutosMk

Serie 8: No tiene una parrilla enorme, pero no hace falta. Es igualmente mal integrada a la estética frontal. Revivieron la Serie 8 solo para demostrar que el que podía ser el retorno de la marca al buen diseño, lamentablemente el resultado  es un auto que tiene las mismas carencias estéticas de los demás modelos: Frente mal diseñado, y luces traseras que parecen de auto japonés.

BMW Serie 8 / AutosMk

Series X: Ya se venía arrastrando errores muy grandes de concepción de toda la gama de SUV de BMW, pero la coronaron con la X7. Esta última es tan fea que incluso una Cadillac Escalade luce más bonita y bien lograda. ¡Sí! Una Escalade!
Basta decir que es tan fea, casi, como una Infiniti QX80.

BMW X7 / AutosMk
Serie Z: Para nadie es un secreto que BMW nunca ha diseñado un coupe convertible bonito. Pero que esta generación sea la base del nuevo Toyota Supra les resta cualquier resquicio de exclusividad.

BMW Z / AutosMk

Serie i: El Serie i3 reúne todos los males del lenguaje de diseño de BMW después de una descarga eléctrica en este pequeño modelo.

BMW i3 / AutosMk

El único auto que merece un reconocimiento por su diseño es el i8. ¿Porque? Permítanme darles una clave: ¡No tiene parrilla! Apenas una simulación de ella.

BMW i8 / AutosMk

Conserva además el formato del poste C que tanto distinguió al perfil de los sedanes de la marca.
Y… ¡Voila! No comparte el diseño de lámparas traseras de otros coches de la marca.

Es cierto que todo el mundo se está quejando de las parrillas de BMW, y lo confirmo, son feas, mal logradas y adaptadas en cada caso, pero esto es solo la punta del iceberg. Las carencias estéticas son más profundas y el futuro a corto plazo no luce muy prometedor.

BMW  / AutosMk

No es que todo en BMW este mal, no señor, pero nos gustaría que esa excelencia mecánica se entregara en una envoltura más atractiva.