Francia, 1950, Después de la II
Guerra Mundial. Jean Rédélé se gana la vida como mecánico de autos en la ciudad
francesa de Dieppe, en el departamento de Sena marítimo, frente a la costa del
canal de la Mancha.
Y como buen amante de la mecánica
es también un apasionado de la velocidad y las carreras de autos.